Subes a mícaes del infierno
los labios cargados
el pecho sediento
el pecho sediento
el imán de tus manos
las conduce a mi pelo
y las pierde las enreda
las conduce a mi pelo
y las pierde las enreda
yo te alzo te enciendo
rescribo tu cintura
con la sal te sublevo
y la nostalgia del mar
te convierte en velero
navego tus costas
acaricio tus senos
leves como el agua
para mi sed dispuestos
rescribo tu cintura
con la sal te sublevo
y la nostalgia del mar
te convierte en velero
navego tus costas
acaricio tus senos
leves como el agua
para mi sed dispuestos
y entonces el delirio
y entonces el exceso
el desorden la insolencia
y un temporal de besos
besos dentelladas
besos mansos y tersos
besos de hambre antigua
besos dentro de besos
y entonces el exceso
el desorden la insolencia
y un temporal de besos
besos dentelladas
besos mansos y tersos
besos de hambre antigua
besos dentro de besos
nos clavamos miradas
nos herimos nos tememos
nos herimos nos tememos
mas lenta mansamente
a su cauce vuelve el tiempo
a su cauce vuelve el tiempo
todo duró un suspiro
un suspiro en el silencio
un suspiro en el silencio
y ahora mi piel se aleja
de tu piel de tu incendio
de tu piel de tu incendio
reza triste la calle
mojada del aguacero
ya pasó la tempestad
mojada del aguacero
ya pasó la tempestad
y el sol asoma sus dedos
para secar los caminos
para secar los recuerdos
para secar los caminos
para secar los recuerdos
2 comentarios:
Oh... qué poema más apasionado.
=)
y lindo.
¿Ya ve Ud cómo le sienta bien la poesía?
La imagen de los besos dentro de los besos... qué afortunada y bella. Digo... todo me ha gustado pero puestos a elegir una línea, yo me quedo con esa.
Bonito día querido Sir Jhon More.
S. Thana.
Fue sólo un intento, Roxana. Usted me mira con ojos demasiado buenos. Pero, como diría el castellano viejo (o afrancesado, quién sabe, que yo falté a la clase de lengua donde explicaron esto), en gustándole a usted, bien mereció el esfuerzo... Besos (estos sí) poéticos.
Publicar un comentario