jueves, 3 de junio de 2010

La clandestinidad del alma

hotel dolceDesde hoy se reúne en el Hotel Dolce de Sitges el Club Bilderberg. Este grupo, cuya composición es en principio secreta, reúne cada año, en un lugar diferente, a banqueros, expertos militares, personajes influyentes de los medios de comunicación, líderes políticos de Europa y América del Norte y miembros de la realeza. A pesar del supuesto secreto con el que se reúne, corren por ahí listas acreditadas de participantes, incluso para la reunión que comienza hoy. Por parte de España acudirán, entre otros, nuestra discreta y querida reina Sofía, nuestro preclaro y civilizado presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y nuestro prestigioso periodista y no menos soberbio novelista Juan Luis Cebrián, consejero delegado del grupo PRISA.

Alrededor del Club Bilderberg, que se reúne desde 1954, se han creado todo tipo de especulaciones, apuntando generalmente a que es el verdadero centro de decisiones mundial. Uno se pregunta qué hace ahí el presidente del gobierno español, cuya cuota de poder en el mundo es tan limitada, pero parece ser costumbre invitar al presidente del país anfitrión. Así, zapaterodicen que Zapatero tratará de defender en una conferencia la salud de la economía española, y la confianza que los grandes deben tener hacia España...

Por supuesto, hagan lo que hagan estos excelsos individuos en el lujoso hotelito de Sitges, todo acaba siendo secreto. No hay conclusiones públicas, no hay periodistas, la policía (pagada por todo cristo) se encarga de que nadie, ni curiosos ni molestos grupúsculos antisistema, se acerque a los señoritos. Fuera de las teorías conspirativas, no se conoce quién o quiénes diseñan la lista de invitados, pero ya se sabe que entre amigos de este nivel las cosas siempre vienen rodadas. Personajes de muy variado pelaje han ido componiendo el auditorio del Club en todos estos años: Kissinger, Rumsfeld, Blair, Thatcher…

Recuerdo que, en tiempos del carismático Felipe González, verdadero adalid de todas estas modernidades financieras en España, hubo un incendio en un edificio de Madrid. La noticia pasó Felipe González 1desapercibida, y hoy me ha sido imposible localizarla; se decía que algunos bomberos o alguien del personal de seguridad del edificio vieron que en el desalojo de cierta sala surgió un buen grupo de políticos socialistas influyentes, algunos con cargos en el gobierno, y un buen número de banqueros y grandes empresarios. Nada se supo de esta reunión, que al parecer se estaba realizando en el más absoluto de los secretos. Desde entonces, siempre he pensado que mi voto no vale gran cosa. Esta intuición, por supuesto, era reafirmada por otros muchos datos que con sólo observar con cierta atención las noticias cotidianas cualquiera puede obtener.

Pero más allá de esta sensación bastante probable, en la que determinados políticos, banqueros y grandes empresarios, destacando entre ellos los de los medios de comunicación, son los que dirigen este país y este mundo, e incluso aunque al final todo fuera un episodio más de nuestra paranoia ciudadana, yo les haría hoy un par de preguntas al conciliador y buenazo de Zapatero, a la cariñosa y sonriente reina Sofía y al progresista y librepensador Cebrián:

¿Qué coño hacen ustedes en ese hotelito?

¿Me podrían explicar, como ciudadano, qué jodidos temas están ustedes discutiendo ahí, y con qué permiso?

Pirámide capitalistaY ahora al aire: ¿de esto se trataba la democracia? Entonces por mí se la pueden ir metiendo donde les quepa. No, no digo que nos devuelvan a aquellas dictaduras sangrientas, a las mismas que sufre hoy esa mitad del mundo que ustedes explotan y que aún no es digna siquiera de llenarse de tristes consumidores. Pero, hagan el favor, no me pidan el voto, no me pidan que escuche a esa banda de titiriteros ignorantes y ridículos que tienen contratados por todo el país, y que con métodos idiotas pretenden hacernos creer que la política existe, y que el poder reside en el pueblo.

Sí, la especie humana acabará por llenarlo todo de basura, por demostrar hasta qué punto puede estar podrida su alma, hasta dónde puede llegar su maldad. La mafia más elegante ha tomado el mando, ha depurado sus métodos y ahora este mundo no tiene, por supuesto, otra solución que la clandestinidad del alma.

23 comentarios:

Sandro dijo...

Totalmente de acuerdo...
Vota P.H. (papel higienico)
Un besote...

Anónimo dijo...

Habitamos permanentemente en una ficción, y se nos olvida.

Un abrazo.

T dijo...

A mí las teorías conspiranóicas de cualquier laya me divierten mucho en las novelas, pero sinceramente, éstos de Bildeberg como hace años los de la Trilateral, no creo que manejen los hilos del mundo más allá de la influencia que cada uno de ellos tenga pro separado.

Creo que tienen derecho a reunirse y que no necesitan permiso de nadie, entiendo que el hotel no está pagado con fondos públicos y que la seguridad del hotel, y de los alrededores, viene impuesta por la presencia de Jefes de Estado y/o de Gobierno.

Reuniones discretas, que no secretas porque las conoce todo el mundo, hay muchas y no sólo ésta. Ni creo que derriben y pongan gobiernos a su antojo ni que decidan que van a hacer quebrar ningún banco, a lo mejor es que soy una ingénua. Si confieso que me encantaría conocer el discurso de Zapatero ante tan selecto foro.

Sandro dijo...

Entre la "grasias" de Felipe y los chistes verdes de la Thatcher la verdad es que no creo que decidan nada... son unos cachondos cuando se toman dos copitas...
Perdona que dude, querido "T", que paguen a escote estos señores la roncha que van a dejarnos en andorra... si no lo pagan con dinero publico... dios proveera hermano, que a los ricos siempre les sale el sol por algun lao, no te quepa duda...
Zapatero no creo que vaya a dar discursos, ademas creo que tendra la lengua muy ocupada en otras cosas...
Besitos a todos, queridos...

Sir John More dijo...

Va a ser eso, querido Transcriptor, que vivimos en una ficción, pero en otra ficción que la que tú y yo pensamos. No sé cómo no hemos caído hasta ahora en que todos los millonarios y poderosos de este mundo se lo han trabajado desde la base. Imagino que todos empezaron como botones, o como chicos para todo al servicio del bonachón mandamás de un banco. La vida es hermosa, joder, y todos esos cientos de millones de almas que afean esta incomparable obra del Altísimo con sus hambres y sus problemas son el fruto de la indolencia, de la vagancia, del vicio y de, lo que es peor, la falta de iniciativa emprendedora. Esas grandes riquezas se formaron pesetita a pesetita, centimito a centimito, gotita a gotita de sudor de todos esos hombres y mujeres que se reúnen ahora para charlar sobre el mundo y decirse: todo puede ir mejor. ¿Acaso no tienen derecho? Y si invitan a sus buenos amigos, los presidentes del cotarro, pues a ver, tendrán que pagar los súbditos, ¿no? Es precisamente la influencia que cada uno de estos próceres tiene por separado lo que les permite encontrarse para dialogar, como seres civilizados, sobre el futuro de este planeta. Y luego irse a París a ver ganar a Nadal, que somos todos la mar de lindos y la mar de deportistas. A mí encantaría conocer París, y no digamos ya a cualquier jovencito de los suburbios de Calcuta… Aunque ése igual ni sabe lo que es París… Si es que la ignorancia lo que provoca es eso, pobreza, y hay gente filantrópica que no puede hacer más que ser multimillonario, porque alguien tiene que suministrarle armas a esas pobres criaturas para que se defiendan, y entretenerlos con guerras y sacarles el petróleo de su subsuelo, porque ellos… a ellos se les desparramaría todo y llenarían todas sus sucias chabolas de crudo y… Sí, va a ser eso, que vivimos en una ficción…

T dijo...

Yo creía que iba de conspiraciones pero resulta que no, que va de demagogia. Con perdón.

carmen dijo...

Fantástico, Sir. Eso digo yo. ¿Qué coño hacen ustedes en ese hotelito?, ¿qué jodidos temas tratan ahí sin mi permiso?
Yo voto porque cuando deje el poder un mandatario, un politico, o un politiquillo del tres al cuarto, sea juzgado por la población de ese pais(jurado público, no jueces de estómagos agradecidos, listos). Y si es condenado, vaya a la carcel por sus dispendios o mentiras. Hacen tanto daño como los mafiosos o los traficantes. Además nos dejan con un mano delante y otra detras. ¿Si o no?
Ufff, qué mosqueo tengo.

Sir John More dijo...

demagogia, (Del gr. δημαγωγία).

1. f. Práctica política consistente en ganarse con halagos el favor popular.

2. f. Degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder.

Aun así, lo dicho, la ficción de un mundo lleno de pobres sin derechos ni oportunidades, saqueado y dirigido por una panda de indeseables, nos lleva directamente a la demagogia (a una especie bien extraña de demagogia, por cierto). Y también va a ser que el excesivo bienestar no sólo aleja a las personas de la demagogia, sino que les atrofia ciertas glándulas reguladoras de la sensibilidad más imprescindible.

Carmen, escucha al Transcriptor, no te me mosquees...

Sean dijo...

Parece mentira... ¿Vieron ustedes la foto de ayer de los resposables de Economía de la Eurozona tras la firma del documento de blindaje monetario? ¿De qué coño se reían? Yo te lo voy a decir: de tí y de mí, de todos nosotros. Gobiernos corruptos que gobiernan cuidando sus fétidas poltronas y con la vista puesta en la Banca y la Bolsa, ¡ah! y la mano en tu bolsillo. Y si, vivimos en una ficción la mar de bonita, te recomiendo The Wire. Abrazos.

T dijo...

Es mucho más precisa, y más dura, la definición de Dña. María Moliner: "el halago de la plebe para hacerla instrumento de la propia ambición política".

¿Los responsables de economía de la Eurozona son asimilables a los de Bildeberg?

Sir John More dijo...

Soy poco de series, Sean, pero tendré en cuenta el consejo... Un abrazo.

Sobre Doña María, T, estoy de acuerdo en que su definición es más clara y más original, aunque no sé si más dura que la de los amigos académicos. Lo que sí parece es que el significado que da a la palabra es el mismo que le dan los otros. Puesto que en este blog, que yo sepa, nadie tiene ambiciones políticas, la palabra demagogia no está demasiado bien aplicada. Aunque también puede ser que la utilices como sinónimo de charlatanería, de discurso vacuo y estridente, y es por eso que te digo que la realidad del mundo desmiente varios millones de veces los argumentos tranquilizadores sobre la discreción y las buenas intenciones de los poderosos, que no es que sean asimilables a los responsables de economía de la Eurozona, es que son sus amigos, e incluso, en muchas ocasiones, los mismos sujetos.

Sean dijo...

Estimada "T", en mi humilde opinión, son sus lacayos, los pastores de los "señoritos". No hace más de tres días la justificación dada por nuestro ínclito Presidente a la urgencia de la reforma laboral "negociada" actualmente por los rastreros y subvencionados agentes sociales era la de "tranquilizar" cuanto antes a los "mercados". No se refería precisamente al mercado de mi barrio o el tuyo. Saludos.

T dijo...

He utilizado la palabra demagogia impropiamente, lo sé, porque tu parrafada me ha sonado a discurso buenista y soy de las convencidas de que con esos discursos no se va a ninguna parte.

Lo de que a tí tambiémn te gustaría conocer París como a cualquier jovencito de Calcuta me parece, con todo respeto, un argumento penoso porque estoy convencida de que tú, si no conoces París, es porque no has querido y no porque no puedas. El de Calcuta tal vez no llegue nunca a cumplir tus años porque antes se muera de hambre o de una enfermedad que aquí te curarían en tres días. Por eso utilicé impropiamente la palabra demagogia, porque no tendrás ninguna ambición política pero tu parrafada de ayer la podría haber utlizado perfectamente cualquier polítiquillo de tres al cuarto, de ésos que desprecias, para sensibilizar al auditorio.

Mira Sir, leo los ínformes de Caritas sobre la situación de pobreza que tengo al lado de mi casa y no necesito ir a Calcuta y tampoco tengo que echarle la culpa de esa situación ni a los de Bildeberg, ni al Eurogrupo. Me basta con culparme a mí misma porque desde mi cómoda situación hago muy poco para poner remedio a los cientos de situaciones desesperadas que tengo al lado.

'Piensa globalmente, actúa localmente'es un slogan muy viejo de los movimientos ecologistas y una de las pocas cosas con las que estoy de acuerdo con ellos. Aplicado a la pobreza, daría unos resultados impresionantes pero... estando los de Bildeberg de chivos para que voy yo a renunciar a mis vacaciones y a todos mis caprichos.

Sir John More dijo...

Es decir, ¿que tú crees que la solución a la pobreza en el mundo se encuentra en que todos colaboremos con Cáritas y otras organizaciones por el estilo? No entraré en el hecho de que Cáritas pertenece a una de las organizaciones más ricas de la tierra, y que, por tanto, bien puede considerarse un mero transmisor de la limosna eclesial; y tampoco en que la actividad asistencial que promueve Cáritas en nuestros barrios se encuentra muy lejos de ese desarrollo comunitario sostenible que hace falta en los barrios de nuestras ciudades, y que cualquier organización de trabajo social debería tener como método y objetivo. La acción de Cáritas, desgraciadamente, está mucho más cerca de las, éstas sí, buenistas hermanas de los pobres, que siempre necesitarán pobres para seguir existiendo. Por supuesto que todos tenemos alguna culpa de la situación, pero esa actitud tan cristiana de no juzgar al prójimo y de sentirnos profundamente pecadores (la bobada obvia de la primera piedra y todo eso) es la que ha mantenido a muchísima gente sojuzgada durante siglos, para que una panda de espabilados, entre los que los eclesiásticos siempre se han encontrado en un lugar privilegiado, dirijan el cotarro y sigan viviendo como reyes (lo sean o no) a costa del trabajo y la miseria de los muchos.

Por otro lado, claro que podría ir a París un año de éstos. He visitado Inglaterra, algunas ciudades alemanas, Irlanda, Escocia, algo de Francia, Portugal, Italia… Pero otros muchos años me he quedado en el (precioso) norte de España porque afortunada o desafortunadamente no soy rico, y no me llegaron los posibles para tomar ese avión que algunos cogen para ir a comprar tabaco, pero para el que yo tengo que ahorrar todo un año. Aun así, entre la vida de este joven de Calcuta y la mía hay un abismo, es cierto, pero no sé hasta qué punto la solución es que yo comparta el bienestar bastante básico de mis hijos con la familia de este joven. Tal vez entonces él sería menos pobre y yo más pobre, pero ninguno de los dos saldría de la jodida pobreza. Porque el abismo que hay entre este joven o yo con los individuos que se reunieron el otro día en Sitges, o con los que dirijan este mundo de locos es tan grande, que tanto el joven como yo apareceríamos como dos desgraciados perdedores chapoteando en el mismo albañal.

Continúa en el siguiente mensaje

Sir John More dijo...

He puesto, además, el ejemplo de este joven por irme a un extremo, aunque aún los hay más lejanos y más miserables, porque la miseria no siempre está relacionada con el hambre. Me he criado en los mejores barrios de Sevilla, llenos de gente trabajadora que vio cómo la droga, la desesperación de los jóvenes, la inutilidad de los sistemas educativos, el paro y tantos otros desastres naturales convertían al barrio en una mina de delincuentes. No necesito que me hables de Cáritas, organización que conozco bastante bien, ni de pobres, ni de desahuciados, porque me crié entre ellos, y porque mi profesión me ha tenido entre ellos durante muchos años. Muchos de los amigos con los que jugué de pequeño y de los compañeros de colegio están muertos desde hace bastantes años, y bien pocos se fueron de muerte natural. Y a todos estos pobres no los arreglamos tú o yo con dos buenas acciones que agraden a Dios y a nuestras conciencias, sino pidiendo la reorganización de la riqueza y el freno a las grandes fortunas y a los emporios mercantiles y empresariales basados en el siempre escaso beneficio. Eso no impide que en los barrios marginales, que en las zonas más pobres del mundo, no sigan trabajando organizaciones que luchan con los brazos desnudos contra tsunamis de pobreza, con la miseria que no es tanto fruto de nuestra inacción sino de la acción salvaje de las grandes multinacionales y de los lobbies de poder, esos mismos que pretenden engañarnos diariamente en el primer mundo hablándonos del pueblo soberano. ¿Hay que moverse? Por supuesto, pero no me pidas que mire con una sonrisa cómo cientos de millones de niños se rebozan en la basura, o salen volando destrozados por las bombas y el terror, y que no busque culpables entre esos mal nacidos.

Por último, este discurso te seguirá pareciendo demagógico y muy adecuado para que lo suelte cualquier político, aunque juraría que ninguno que haya llegado al poder aprovecharía una sola de mis palabras. Pero en todo caso, y volvamos a la lingüística, la demagogia de los políticos no significa que lo que digan no sea más cierto que tu evangelio, sino que dirán lo que la gente quiere oír para luego, en el poder, decir y hacer otra cosa muy distinta. La demagogia tiene mucho que ver con la hipocresía y con el cinismo, otras dos cualidades imprescindibles del buen político actual. Por el contrario, este discurso mío tiene sólo una pequeña pero insistente virtud: está tejido con palabras, que leerán cuatro o cinco amigos, y tal vez a alguno le aporte alguna idea. Sin palabras, sin ideas, no lo dudes, nada se puede hacer en este mundo, y en ese esquema que tan bien conocemos aquí en España, donde unos pocos gobiernan y manejan las fortunas, y donde los más se dedican a repartirse las miserias (económicas o sociales), no suelen caber otras palabras que las demagogias de esos que tú defiendes con tan intrigante ardor.

T dijo...

Conocerás muy bien Caritas pero no lo parece y también parece que ignoras que sus informes sobre la pobreza son los más apreciados por su rigor y solvencia por todas las organizaciones internacionales.

(http://www.caritas.org) Te dejo el link a su web internacional para que tengas una idea más clara de lo que hacen y de los fondos de los que se nutre y con los que lleva a cabo todas sus actuaciones.


Mi defensa sobe el derecho de los Bildeberg, o de cualesquiera otros, a reunirse sólo se basa en algo tan simple como la Constitución Española que lo considera una manifestación primordial de los Derechos Fundamentales (LO 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión). O en el artículo 20 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 que establece que la libertad de reunión es un derecho inherente a todas las personas.

Creo en la libertad y la responsabilidad individual y por eso creo que cada uno tiene una esfera de responsabilidad ineludible.

Por último decirte que yo si conozco Calcuta por eso sé que entre tu situación y la de cualquier paria de Calcuta media un abismo y que la miseria de este primer mundo, con ser terrible, no se puede ni comparar a la de los más desheredados de la tierra.

Sir John More dijo...

La Constitución, que debemos respetar hasta que no tengamos otra, es bastante mejorable. Aun así, hay otros muchos artículos que no se cumplen, algunos de ellos, qué curioso, gracias a la acción discreta y seguramente filantrópica de estos personajes. Aquí tienes sólo unos cuantos:

Art. 10.1. La dignidad de la persona, los derechos inviolables que le son inherentes, el libre desarrollo de la personalidad, el respeto a la ley y a los derechos de los demás son fundamento del orden político y de la paz social.

Art. 22.5. Se prohíben las asociaciones secretas y las de carácter paramilitar.

Art. 35.1. Todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo.

Art. 40.1. Los poderes públicos promoverán las condiciones favorables para el progreso social y económico y para una distribución de la renta regional y personal más equitativa, en el marco de una política de estabilidad económica. De manera especial, realizarán una política orientada al pleno empleo.

Art. 47. Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación.

Y no te cuento ya de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la que estos señores se carcajean, eso sí, con suma elegancia y sabiendo vestir.

Por otro lado, la gran obra propagandística que supone Cáritas para la Iglesia no impide que cada uno de los bocadillos que reparta aquí o en Somalia no sea comido con verdadera alegría y alivio. Si se le pidiera a Cáritas que, a la hora de repartir bolsas de comida, no hiciera proselitismo entre las personas necesitadas de este mundo, creo que quedarían cuatro trabajando en el mundo, pero de este tema ya hemos hablado en otros comentarios.

¿Y en el caso de los pobres, de los que nacen en un entorno radicalmente hostil que les impide toda iniciativa personal, hiperpobres de la India o de Perú, y menospobres de los barrios pobres de nuestras ciudades, también crees que tienen una esfera de responsabilidad ineludible? ¿Crees en su libertad y en su responsabilidad individual? ¿Y crees también en la igualdad de derechos y de oportunidades para todos, pobres y ricos? ¿O crees más que el derecho a la propiedad privada debe anteponerse a los demás?

Con lo de Calcuta, a ver en qué quedamos, porque si hablo de Calcuta, que aquí al lado también hay pobres, y si hablo de los pobres de aquí, que para pobres los de Calcuta. No he estado en Calcuta, me moriría de tristeza después de un viaje así, soy así de blandito, ni mejor ni peor que los que aguantan esas visiones, pero no soy tan corto como para cerrar los ojos a lo que hoy podemos ver en cada telediario. Te he reconocido que entre la miseria de Calcuta y mi bienestar básico hay un abismo, un verdadero abismo. Entre la tierra y el sol hay una distancia astronómica, mareante. Pues bien, esa distancia es una verdadera tontería, un saltito insignificante comparado con la distancia que hay entre nuestro sistema solar y la galaxia más cercana, no digamos con la que nos separa de lejanas galaxias. Pues igual, T, igual, debemos tener en cuenta las diferencias entre el bienestar medio de un país desarrollado y el malestar medio de uno no desarrollado, pero no me cierres los ojos a la distancia de millones de años luz que separa a cualquiera de esos individuos del resto de los mortales, en dinero y en poder. Mi responsabilidad en este desaguisado mundial, comparada con la de uno de estos tipejos, es prácticamente nula, y si alguna tenemos los pobres no tan pobres, tal vez consista en respetar algunos artículos de la Constitución sin exigir por las bravas que se cumplan otros muchos.

LLG dijo...

"El problema es que los mansos son el problema"
Monty Python.

Un saludo

Sir John More dijo...

Hace poco, por no sé qué razón relacionada con la muerte de mi amigo Jesús, vi precisamente el vídeo del funeral de Graham Chapman, un funeral fabuloso donde el protagonista no era ningún Ente Supremo, sino el propio agasajado. Y sí, en religión poca gente más preparada que estos gamberros...

Un abrazo, Luis, y encantado de pasearme por tus Escomberoides.

Anónimo dijo...

Muy bonito todo lo que escribes

Sir John More dijo...

Muchas gracias, amigo o amiga Anónimo. Tal vez, en parte, sean los ojos con que me lees... Abrazos.

Anónimo dijo...

és para estar contento Zapatero

Sir John More dijo...

Zapatero, Rajoy... Son dos más de los muchos, Eva... Saludos.