lunes, 24 de enero de 2011

Alborada

La luna de noche larga se desinfla suspendida en la fría bruma del cielo. El suelo bulle de prisas y compromisos. Mis pasos navegan sobre las aceras rotas, en esa penumbra confusa del imperfecto y desafinado amanecer. Las acacias posan larguiruchas, esqueléticas, avejentadas, mientras las ramas de aquellos plátanos, iluminadas aún por la luz artificial de unas desengañadas farolas, afierran sus hojas escasas contra el viento helado de la mañana que las azota. Un joven vagabundo, ido y cándido, duerme arrimado al exterior de un local vacío. Bajo el saco de dormir su perro enorme asoma la cabeza y observa sereno el infinito con una mirada reflexiva, casi humana, atravesando con ella, absorto, la cortina de piernas y ruedas que fluye incomprensible por la avenida. No hay flechas, no hay sentidos recomendados, no hay señales de dirección. El paisaje se despinta como si lloviera sobre una acuarela. Mi mirada cae sobre las cosas como la lluvia.

Jackson Pollock - Night Mist

Jackson Pollock, Night Mist (Norton Museum of Art)

7 comentarios:

trimbolera dijo...

"El paisaje se despinta como si lloviera sobre una acuarela"
Es precioso.

Sir John More dijo...

Y sin llover era verdad, de veras...

Anónimo dijo...

Alguna vez he podido sentir que los contornos, las siluetas, las sombras, igual que las circunstancias, siempre siguen en negro y bien perfiladas, los colores son los que se habían mezclado y desvaído hasta acabar fundidos en un tono mate y uniforme, en una neutral ausencia de significado.
un beso Azul mezclado con sobras de Rojo de la madrugada.
Barbas, requetemuáaaaaaaaaa

Sir John More dijo...

Me has recordado a cierto monje que vio un dragón con plumas...

http://www.youtube.com/watch?v=zzx02H_zr7k

carmen dijo...

Es verdad, Sir. No hay flechas ni señales de dirección, pero en el fondo eso es lo bueno.
Me ha gustado mucho.

Anónimo dijo...

Barbas, Qué poquísima vergüenza... vamos ninguna, así, sin paños calientes ni ná de ná. No estarás insinuando que me dopo? :-P,
¿Será que el caldo tiene demasiados -itos y -oles añadidos?
Bueno... que hoy me despido, pero sin beso, que lo sepas, :-P

Sir John More dijo...

Sí, Carmen, imagino que Las flechas y los sentidos sobran o faltan dependiendo de lo desvalido que uno se encuentre al despertar. Un beso contento con tu gusto.

El caldito con un chorrito de Jerez queda riquísimo, Anónima, pero yo lo decía porque los espíritus inmateriales como tú viven para nosotros, los pobres mortales, en regiones inaccesibles del Éter, más o menos como los dragones con plumas... Besitos sin rencor.